GUIA DIDACTICA CITRICULTURA - CAPITULO 5: Principales plagas I En citricultura la variedad y cantidad de plagas es muy amplia.
Estas afectan al ciclo vital del árbol, y dependiendo la época del año tendremos unas u otras. Como norma general existe dos maneras de combatir la plaga; una es mediante control biológico, y la otra por control químico. Normalmente el control biológico, que trata de combatir la plaga mediante otro insecto que se alimenta de él, es un buen sistema para controlar la plaga, pero no suele ser efectivo cuando ya hay un cierto descontrol de la misma. El otro sistema es el químico, este control actúa al instante, y en muchos casos es el más efectivo.
Daños y control de plagas
Una de las principales y más conocidas plagas actualmente en cítricos es el Piojo Rojo de California o Aonidiella aurantii Maskell. Este insecto está clasificado como diaspino dentro de la familia de las cochinillas, y afecta a todas las especies de cítricos. Debe ser controlada por todos los medios disponibles para evitar que afecte a la producción del árbol. El diaspino chupa la savia del árbol provocando una pérdida de vigor en las ramas afectadas que deben ser cortadas al quedarse a veces hasta secas y defoliadas. La fruta afectada por esta plaga hace que esta no pueda ser comercial, ya que la deja decolorada y marcada. Para su control biológico el parasito Aphitus melinus está muy bien considerado, aunque por lo general el control químico es necesario. Actualmente se está desarrollando un sistema de trampeo masivo para intentar eliminar el control químico y evitar así los residuos.Otra de las principales plagas es la araña roja o Tetranychus urticae Koch. Esta es una de las principales plagas en mandarino, especialmente del grupo clementinas. Actualmente es una de las plagas más complicadas de eliminar debido a que se protege en el envés de la hoja, enrollándola y tejiendo una tela de araña donde se protege y se condensa la humedad, lo que le permite sobrevivir a condiciones adversas. Este insecto se alimenta de la savia de las hojas, que envejecen y caen. Asimismo, llegado el final del verano, la plaga se moviliza hacia la mandarina afectando a la zona estilar (parte de abajo de la mandarina). Para su control se requiere de control químico (acaricidas), siendo difícil su eliminación ya que se debe mojar bien las zonas afectadas para acabar con la plaga. Hay diversos fitoseidos como Amblyseius californicus o Euseius stipulatus que pueden ser útiles, pero que no llegan a controlar la plaga, sin un control químico eficiente.
Otra importante plaga es el ácaro rojo o Panonychus citri McGregor. Esta es importante en cítricos en general, pero afecta principalmente a naranja del grupo Navel y mandarino hibrido. A diferencia de la araña roja esta es más fácil de control, ya que coloniza la parte de arriba de la hoja y no teje tela de araña, por lo que la aplicación de químicos es más fácil y eficaz. Además de esto, su control biológico es mucho más efectivo que con araña roja. El fitoseido Euseius stipulatus tiene gran control sobre la plaga. El acaro rojo chupa la savia de las hojas y disminuye así la capacidad fotosintética, así como decoloración de las mismas. Al final del verano “salta” a los frutos y merma mucho su valor comercial.
La araña verde o Eutetranychus banksi McGregor es una plaga de los cítricos en general, que afecta por igual a todos los géneros. Se caracteriza por la rápida colonización que consigue en poco tiempo. Suele aparecer entre agosto y septiembre, el periodo de más baja densidad de fauna auxiliar debido a los fuertes calores. Por ello el control biológico no ha sido efectivo y es necesario el control químico. Los daños son parecidos a los del acaro rojo.
Por último y para terminar con el capitulo voy a hablarles del ácaro de las maravillas o Eriophyes sheldoni. Es una plaga principalmente del limonero, aunque también puede afectar al grupo de naranja Navel. Es una araña muy pequeña que se refugia muy bien en los entrenudos y al inicio de la brotación sale de su refugio y chupa la savia de los brotes. Es muy difícil de controlar y la fauna auxiliar no es efectiva. Los daños pueden ser muy severos ya que el fruto queda totalmente deformado y no sirve para su comercialización.